domingo, 11 de diciembre de 2016

SERIE SOLIDARIA SUPERDEPORTE. 9 DE DICIEMBRE.


UN NIÑO, UNA OPORTUNIDAD.

En esta magnífica oportunidad que nos ha dado Superdeporte para ser altavoz de la mejor solidaridad valencianista hemos desgranado hasta ahora proyectos que la Penya Valencianista per la Solidaritat ha desarrollado en el Tercer Mundo pero tenemos que decir que en esto de las necesidades infantiles y los sueños por completar… Valencia también existe. Es por ello por lo que estamos desarrollando tres proyectos deportivos en nuestra ciudad en tres colegios de los barrios en situación de mayor emergencia (Nazaret, Fuensanta y Malvarrosa), con una infancia carente de muchas cosas que nos parecerían impensables en este occidente feliz. Historias como la que sigue son ejemplo de que vamos por el buen camino.

Eran las 11.32 del jueves 21 de Julio y su gran preocupación del día era preguntar al coordinador de deportes del Colegio Jesús-María Fuensanta de Valencia si ya sabía quién iba a ser el entrenador de la siguiente temporada. Y es que en este paréntesis del verano, entre el subidón de acabar el cole una vez más y el comienzo del nuevo curso escolar, las actividades pueden ser infinitas junto a la familia o, por el contrario, puede que haya demasiadas horas muertas y el aburrimiento impere en algunos chavales. Esto ocurre en el barrio de la Fuensanta que se caracteriza por ser un barrio de nuestra ciudad formado por una necesidad acuciante después de la riada de 1957 de hace ya cincuenta y nueve años. Las ayudas del Estado más las ayudas de la Comunidad de Murcia, que además da nombre a la plaza donde se encuentra el colegio, plaza de Murcia, hicieron posible que las familias ocuparan estas viviendas de aluvión. Hoy las familias que viven en este barrio han sufrido de lleno la crisis haciendo que el paro afectara a muchas de ellas por lo que, dentro de estas familias, las cualificaciones académicas apenas existen y todo esto genera escasos recursos económicos. Por tanto, esta situación social deja sin horizonte a los niños y niñas del barrio que necesitan un revulsivo en forma de centro escolar comprometido con ellos. Y nuestro colegio, ahora que tiene a los chavales en sus manos, lo que pretende es darles forma para que vean en el deporte una alternativa y una forma de vida que da oportunidades a todos y en la que la inclusión hoy es un hecho real. Y es que el barrio de la Fuensanta es un barrio vivo, desconocido por muchos por hallarse fuera de cualquier circuito turístico, rodeado por unas avenidas, que no calles, con mucha historia en nuestra ciudad, como son la avenida del Cid, la avenida de las Tres Cruces y la avenida de Tres Forques.

Y aquí se cruzan las dos mejores “avenidas” que el deporte del Colegio Jesús-María Fuensanta podía esperar; una, el propio colegio y, la otra, la Penya Valencianista Solidaritat. Todo empezó un dos de Enero de 2.014 y, como todos los principios de año, aquel empezó con nuevos retos. Este reto podemos decir que ha empezado a consolidarse sobre todo porque los objetivos del proyecto estaban claros; queremos que los niños hagan deporte y ocupen su tiempo mejorando deportivamente pero, sobre todo, que sean solidarios con los demás, que respeten, que formen un equipo, que tengan un sueño y que ese sueño les permita, en definitiva, ser mejores personas en el mundo. Porque lo que se pretende en este colegio es que los chavales desarrollen su personalidad íntegramente y que crean que el mundo puede ser mejor gracias a ellos y a través del deporte. Para conseguirlo la Penya Valencianista per la Solidaritat asume los costes de tres equipos de fútbol sala y tres de baloncesto de varias edades y sin barreras de género.


Hemos empezado el artículo hablando de un chaval que preguntaba si había un entrenador para la siguiente temporada. Él es Adrián, de etnia gitana, con un corazón enorme, un chaval que ayer no quería entrenar o prefería quedarse jugando por la calle, pero hoy es el que pide compromiso a su grupo, un capitán, un fijo en cada día de colegio, una alegría para los compañeros, en definitiva, un ejemplo de los resultados que da el proyecto del Colegio Jesús-María Fuensanta con la Penya Valencianista per la Solidaritat y que hará que las pequeñas calles del barrio algún día se conviertan en avenidas…